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    Verónica Murguía

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  • El disco del mes

    Ma Fleur

    Cinematic Orchestra

    Excelente disco de Acid Jazz que cuenta con la colaboración de importantes voces como la de Fontanella Bass y Patrick Watson

Fragmento de "El beso perfecto"

Ella levantó la vista y nuestros ojos se encontraron. Contemplé largamente su rostro; quería sumergirme en cada milímetro de su piel; deseaba penetrar en lo más profundo de sus pensamientos.

Mientras mis manos apartaron aquellos largos cabellos perfumados, su encantador olor me enloquecía. Me gustaba sentir que aquella esencia era un regalo para mi, y solamente para mi. Me había creado un mundo en el que ella me pertenecía.

 

Nuestros párpados se cerraron. Nuestros rostros se aproximaron y pude por fin sentir el suave roce de sus labios con los míos, que ardían de deseo.

Nuestros inciensos se mezclaron, probé sabores nuevos nunca antes degustados. Nuestros labios encarnaban una lucha a muerte.

La abracé y traté de acercarla a mi cuerpo. Ella rodeó mi cuello con los brazos. Pude sentir sus dedos acariciando mi nuca. Durante aquellos minutos, que parecían no tener fin, nos aislamos del mundo, dejamos de ser dos y nos convertimos en uno.

De pronto, la conocía. Hacía tan solo cinco minutos que éramos un par de desconocidos que jamás habían cruzado palabra alguna. Me preguntaba si ella sentía lo mismo.

Mientras tanto, mis labios continuaban explorando sus comisuras, y mi mente volaba hacia un futuro incierto. ¿Qué pasaría cuando nuestros labios se separaran? ¿Sería el inicio? ¿Sería el fin? Nada me importaba.

Cuando por fin nos apartamos y nuestras miradas se encontraron nuevamente, me invadió un impertinente cosquilleo en el estómago, y pude sentir un leve rubor dibujado en mis mejillas. Ella parecía adivinar mis pensamientos porque en ese momento bajó la mirada y apoyó su cabeza en mi hombro.

Yo no estaba seguro de lo que me esperaba; mis emociones mezcladas no me permitían razonar con cordura. Me sorprendió una sensación cálida y profunda en el corazón por causa de aquella desconocida, sin embargo, no tuve palabras, pero añoraba aquellos labios que hacía un instante eran parte de mi.

 Aquel beso había sido simplemente perfecto…